
¿Tienes un proyecto de guion pero todavía no lo has escrito y necesitas seguimiento personalizado?
Te acompaño
Cuando comenzamos a escribir un proyecto, a veces quedamos atascados en algún punto del proceso o encontramos alguna dificultad que nos cuesta superar. Es algo totalmente humano y natural. Escribir es una tarea solitaria e individual, y eso puede ser maravilloso en algunos momentos, pero también puede pesar en otros.
Al elaborar la arquitectura narrativa, estamos procesando y trabajando con mucha información al mismo tiempo que todavía necesita ser concretada y bajada a tierra. Eso puede atorarnos y ser un factor que nos paralice o nos haga perder la visión de dirección que nos impulsó a crear en primera instancia.
Contar con el apoyo de otro escritor que, ajeno al proyecto, nos ayude a reconducir el trabajo y nos sirva de guía a lo largo del proceso de escritura, puede ser de gran ayuda.
Yo he estado ahí y por eso sé que puedo acompañarte con el máximo cariño y respeto hacia tu trabajo sin perder la objetividad.
Si quieres mejorar tu guion o salir de un bache creativo y necesitas un apoyo prolongado en el tiempo enfocado al desarrollo de tu proyecto, estás en el lugar adecuado.
Tú escribes, yo te acompaño.
¿Qué te llevas?
El proceso:
Agendaremos una llamada telefónica en la que podremos conocernos y en la que te pediré que me hables un poco de ti, de tu trayectoria y del punto en el que estás en el proceso, para asegurarnos de que todo lo que yo pueda aportar se ajuste a tus necesidades y sume en la dirección adecuada.
Una vez nos hayamos conocido, y antes de que me envíes el material, firmaremos un acuerdo de confidencialidad el que se reconozcan los motivos por los que me das permiso para acceder al material y quede de manifiesto mi compromiso de confidencialidad al tratar la información a la que me das acceso. Además de una declaración responsable de que los derechos de la obra sobre la que vayamos a trabajar están en tu propiedad.
Después de que tengamos estos documentos firmados, podremos comenzar el trabajo y ya podrás enviarme el material que ya tengas escrito (si es que tienes algo escrito, no es obligatorio).
A partir de este punto el proceso consistirá en tutorías, o reuniones de una hora y media (90 minutos) aproximadamente. A lo largo de estas reuniones, hablaremos de tus avances, localizaremos los puntos a mejorar, tanto de la historia como del proceso de escritura en sí, y te propondré ideas, enfoques y ejercicios que te ayuden a movilizar aquellos puntos en los que estás atascado.
Te escucharé mucho. Primero porque al contar uno mismo su historia para que el otro sea capaz de seguirla como tú quieres, ya se produce un mecanismo interno en el que las ideas necesitan ordenarse para ser expresadas. En segundo lugar porque todas mis energías estarán puestas en darte herramientas y claves para escribir eso que tú quieres escribir y no en imponer mi criterio, ni forzar tu historia a encajar en patrones predeterminados. Respetar tu visión es lo más importante para mí para construir y mejorar el guion a favor de ella.
Estas tutorías serán, preferiblemente, presenciales.
(En el caso de que fuera imposible el desplazamiento, también cabría la posibilidad de reunirnos a través de videoconferencia).
Las reuniones podrán ser desde una a todas las que quieras.
El precio y la duración por sesión será fijo y se cobrarán individualmente justo antes del inicio de las mismas.
El espaciado entre sesiones, y la cantidad de veces que nos reunamos lo dejo en tus manos para que te organices como quieras. Pactaremos la fecha, hora y objetivos de cada reunión con al menos 20 días de antelación.
Y, por supuesto, podrás enviarme material actualizado para que lea o relea una semana antes de cada sesión. Así lo podré tener presente cuando nos veamos.